Falta de poda generó caos eléctrico e incendio en Lérida
- por Kelly Perdomo
Daños en transformadores y conatos de incendio evidencian la urgencia de mantenimiento preventivo por parte de Celsia en la población del norte del Tolima.
La comunidad de Lérida se encuentra sumida en la frustración ante la recurrente problemática de los cortes de energía y daños en la infraestructura eléctrica, atribuibles, según los propios habitantes, a la falta de poda de árboles cuyas ramas invaden las líneas de alta tensión.
A pesar de las constantes peticiones y derechos de petición radicados ante Celsia, la respuesta ha sido nula, llevando a los ciudadanos a cuestionar la efectividad de los canales de comunicación y la supervisión de las entidades reguladoras.
La situación se tornó crítica en la tarde del lunes con las fuertes ráfagas de viento. En el barrio Adra Ofasa, colindante con Minuto Tercera Etapa, se reportó la ruptura de una cuerda viva de energía. Sin embargo, el daño mayor se registró en la noche, cuando un transformador de 150 KVA en Adra Ofasa "salió de combate", dejando a parte del sector sin servicio eléctrico. Si bien el grupo de mantenimiento de Celsia trabajó hasta altas horas de la noche para reponer el equipo dañado, la comunidad insiste en que estos incidentes son consecuencia directa de la falta de mantenimiento preventivo.
A la emergencia eléctrica se sumó un conato de incendio en un cable de servicio de internet, presuntamente por recalentamiento, lo que requirió la intervención de los Bomberos Voluntarios de Lérida para controlar las llamas. Este incidente, que por fortuna no pasó a mayores, refuerza la preocupación por la seguridad y la calidad del servicio.
Los residentes de Lérida comparan la situación con lo que sucede en otros departamentos, como Cundinamarca, donde las empresas prestadoras de servicio eléctrico son multadas con sumas significativas (alrededor de 70 millones de pesos) por la Superintendencia si no atienden los daños en un plazo de dos o tres horas. Ante este panorama, surge la interrogante sobre el papel de la Superintendencia en el departamento del Tolima y la efectividad de sus mecanismos de control.
"Los 'aviadores', que son los que vienen a podar las ramas de los árboles, se sientan muy cómodos y no hacen el trabajo como debe ser, dejando a la comunidad insatisfecha", expresó un ciudadano. La inacción y la aparente falta de compromiso por parte del personal encargado de las podas son un punto de constante queja, lo que agrava la percepción de abandono por parte de la empresa y la falta de respuesta a las necesidades de los usuarios.