Denuncian maltrato y falta de pago a contratistas en Coyaima: “Llevamos dos meses sin salario y ni nos dejan entrar a las oficinas”
- por Camila Pinto
El presidente del Concejo, Juan Bautista, alertó sobre una grave situación que estaría afectando a cerca de 90 contratistas de la Alcaldía, quienes además de no recibir su sueldo, estarían siendo reemplazados y hostigados por la nueva administración.
Continúan creciendo las denuncias en el municipio de Coyaima por la presunta persecución política contra contratistas de la administración municipal. Según manifestó Juan Bautista, presidente del Concejo, al menos 90 personas que tienen contratos vigentes hasta diciembre no han recibido pago en los últimos dos meses, pese a que el presupuesto para sus honorarios ya estaba certificado.
“La plata está, el presupuesto está garantizado, lo que hay es una negativa injustificada de la administración, dicen que faltan informes, pero eso son excusas. Aquí lo que se está viendo es una persecución política contra quienes venimos de la administración anterior”, aseguró Bautista.
Además del incumplimiento en los pagos, el concejal reveló que varios contratistas no pueden ingresar a sus oficinas y han sido reemplazados por nuevos trabajadores, generando sobrecarga en el presupuesto municipal. “Hay personas que tienen contrato como comunicadores o personal de apoyo y hoy los ponen a barrer. A otros simplemente no los dejan trabajar. Dicen que sus contratos eran por ‘amistad con el gobierno anterior’. Es una humillación”.
Las denuncias también incluyen maltrato verbal por parte de algunos supervisores de área y presiones para que los contratistas renuncien voluntariamente. “Es evidente que buscan que la gente se aburra y renuncie antes de tiempo para justificar nuevos nombramientos”, añadió.
Bautista aseguró que incluso hay casos preocupantes, como el de una contratista con diagnóstico de cáncer, que tampoco ha recibido su pago y cuya situación ha sido ignorada por las autoridades.
El concejal hizo un llamado urgente a la Procuraduría, Defensoría del Pueblo y Ministerio de Trabajo para que intervengan y garanticen los derechos laborales de los contratistas del municipio. “El alcalde habla de unión, pero ni siquiera respeta a los trabajadores. Esta situación es insostenible”, concluyó.