El exmandatario Julio Roberto Vargas denuncia una intensa persecución política por parte de la nueva administración, señalando que el actual alcalde se comporta como un niño y afirmando que está considerando postularse nuevamente a la alcaldía.

Julio Roberto Vargas, exalcalde del municipio de Cajamarca, ha salido a desmentir categóricamente los rumores sobre una supuesta solicitud de asilo político en Holanda, calificándolos como "falacias" difundidas por los medios de comunicación. Vargas aseguró: "Hasta hoy conozco esas palabras por medio de los medios de comunicación y quiero decir que eso no es verdad. De hecho, yo estoy aquí en el municipio de Cajamarca".

Vargas, quien se siente satisfecho de haber ejecutado 50 proyectos de gran impacto social, turístico y económico durante su mandato, afirmó estar en pleno contacto con diferentes actores de la comunidad que lo están invitando a considerar una nueva candidatura a la alcaldía. "Estoy considerando esa posibilidad y tengo un proyecto político y de vida completamente definido en Colombia. No he pensado en ningún momento salir del país", subrayó el exalcalde.

Sin embargo, Vargas también denunció que está siendo víctima de una persecución política por parte del actual gobierno municipal. "El alcalde de Cajamarca se está comportando como si fuera la oposición, dedicándose a buscar mi caída en lugar de ejecutar obras importantes para el municipio", acusó.

El exalcalde defendió la gestión de su administración, explicando que, aunque quedaron algunas cuentas por pagar a contratistas debido a una caída en el pago de impuestos, todas las obligaciones están claramente planificadas y los recursos ya están llegando para saldar estas deudas, que no superan los 4.000 millones de pesos. "Invito al actual alcalde a concentrarse en la gestión de recursos y la ejecución de obras en lugar de perseguirme. La administración pública no es para cazar peleas infantiles, sino para ejecutar proyectos que beneficien a la comunidad", sentenció Vargas.

Estas explosivas declaraciones han encendido el debate político en Cajamarca, aumentando la presión sobre el actual alcalde para demostrar su capacidad de gestión y responder a las acusaciones del exalcalde Vargas. La comunidad está a la expectativa de cómo evolucionará esta confrontación, que promete seguir dando de qué hablar.