Al acoger los argumentos de la Fiscalía, el Juzgado Segundo Penal Municipal de Ibagué, con funciones de control de garantías, impuso medida de aseguramiento en centro de reclusión, debido a la gravedad y modalidad de la conducta que cometió con dolo, en contra de Laura Camila Calderón Villanueva, por el delito de homicidio agravado, tal y como lo informamos en nuestra emisión matutina de Ondas de Ibagué.

Presuntamente, el 18 de mayo de este año, la mujer le quitó la vida a su bebé de dos días de nacida, tras golpearla y ocasionarle un trauma craneoencefálico severo.

El cuerpo fue hallado por niños que jugaban en el polideportivo del barro Ciudad Luz, al norte de Ibagué, cuerpo que estaba escondido en una maleta deportiva y envuelto en bolsas plásticas y de papel.

La Fiscalía tiene en contra de la procesada, quien no aceptó los cargos enrostrados, varios elementos con vocación de prueba, entre ellos videos de las cámaras de seguridad del barrio Portal de la Paz en donde reside, en los que se evidencia que una persona salió de la vivienda con la maleta y regresó sin ella; misma que fue encontrada en el lugar donde hallaron el cuerpo sin vida de la recién nacida y que la casera identificó como la que la mujer conservaba en el cuarto que le alquilaba.

De igual manera se conoció que días antes de los hechos, escucharon el llanto de un recién nacido en su habitación, pero no imaginaron que podría tratarse de su hija ya que jamás se le notó el embarazo.

Según el dictamen pericial, Calderón Villanueva habría golpeado con un objeto contundente a la niña, lo que le ocasionó una fractura en su frágil cabeza.

La Fiscalía presume que el día del suceso, la dejó sola en su cuarto, desnuda y sin alimento, a la espera de encontrarla muerta; sin embargo, como esto no sucedió, los investigadores pudieron conocer que la mujer le habría quitado la vida para luego abandonarla en una zona boscosa.

Después de cinco meses y de una exhaustiva investigación, la mujer fue detenida en el barrio Topacio, mediante orden judicial, ya que no se presentó voluntariamente a los interrogatorios a los que fue llamada.

La Fiscalía, al solicitar la medida, indicó que se hacía necesaria para brindarle seguridad a la comunidad, y en especial, a su otra hija de 3 años, con quien tiene contacto permanente aunque no vivía con ella.

Laura Camila Calderón Villanueva, permanece a esta hora en manos del Inpec y se prepara para ser trasladada al Coiba de Picaleña.

Por: Juan Manuel Escobar, periodista judicial.