El siniestro que cobró la vida de los progenitores de la menor, ocurrió en el sector del Alto del Río Recio. Al parecer, la pareja la protegió con sus cuerpos hasta el último instante.

​Un suceso que mezcla el dolor y la esperanza conmociona al norte del Tolima. En la noche del pasado viernes 28 de noviembre, un aparatoso accidente de tránsito en la vía nacional que conecta a Venadillo con Lérida dejó un saldo de dos víctimas fatales y una sobreviviente inesperada, una bebé de tan solo cuatro meses de edad.

​Los hechos se registraron a la altura del Alto del Río Recio, cerca al sector conocido como el Alto de la Yuca. Allí, un tractocamión de placas T6-545, que transportaba melaza de uso animal, se salió de la calzada y sufrió un volcamiento total.

​Según el reporte, fue el llanto de la pequeña lo que guio a los Bomberos Voluntarios de Venadillo y Lérida, así como al personal de la concesionaria Alternativas Viales y la Policía de Carreteras.

En una labor heroica, los socorristas ejecutaron maniobras de extricación vehicular para liberar a la menor, quien fue hallada entre los hierros retorcidos, abrazada por los cuerpos de sus padres. Las autoridades presumen que, en un último instinto de protección, la pareja escudó a su hija del impacto mortal.

​Los fallecidos fueron identificados como Juan Sebastián Rodríguez, un conductor de amplia experiencia y tradición camionera, y su esposa, Estefanía López, quienes viajaban como tripulantes. La familia era oriunda de Palmira, Valle del Cauca.

​La bebé fue trasladada de inmediato en ambulancia al Hospital Reina Sofía de España en el municipio de Lérida. Allí recibió atención médica integral y se activó la ruta de protección y restablecimiento de derechos. Se confirmó que familiares de las víctimas ya arribaron a la población para hacerse cargo de la menor y realizar los trámites fúnebres de sus padres.

​Las autoridades de tránsito han iniciado la investigación para establecer las causas del siniestro. Entre las hipótesis se evalúan un posible microsueño, exceso de velocidad o una falla mecánica.

Cabe destacar que este corredor vial, que une a Ibagué con el norte del departamento, presenta una alta tasa de accidentalidad, por lo que se reitera el llamado a la prudencia.