En tanto que las máximas temperaturas se espera sean de hasta 35 grados en Ataco, se genera un consumo mayor de agua potable y la planta de distribución no da abasto para cubrir la demanda existente, ni siquiera en épocas de invierno.

El alcalde Jader Ochoa, señaló como crítica la situación porque se está prestando el servicio con intermitencia, lo que es insuficiente debido a las necesidades que se tienen por la ola de calor que se presenta en el Tolima.

Viviendas, el comercio y las instituciones educativas se ven notablemente afectados, porque deben racionar el agua y almacenarla para la época de sequía.

El mandatario indicó que, la problemática se genera porque la red de conducción desde la bocatoma hasta la planta de tratamiento no tiene la capacidad suficiente para transportar el líquido que se necesita para abastecer el municipio.

Ochoa señaló que, la situación seguirá hasta que no se construya una red nueva, la cual tendría un costo de $1.600 millones.

Por: Paola Rojas Gómez, periodista regional.