Los Bomberos y Defensa Civil luchan contra las llamas en condiciones críticas que han obligado a desalojar a algunas fincas.

Jonathan Perdomo, secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo del municipio de Chaparral, informó sobre la grave situación provocada por un incendio forestal que ha devastado más de 730 hectáreas en las zonas de Juncal, Cristalina y Vereda San Miguel. Desde ayer, el cuerpo de bomberos voluntarios y la Defensa Civil han estado trabajando arduamente para contener las llamas, las cuales se han intensificado debido a los fuertes vientos y las altas temperaturas que afectan la región.

Afortunadamente, no se han reportado heridos, aunque las pérdidas económicas y los daños ambientales son significativos. "Estamos enfrentando una situación muy difícil, con semovientes y porcinos afectados, lo que genera una gran tristeza en nuestra comunidad", expresó Perdomo.

El incendio, que comenzó a cerca de cinco kilómetros de la localidad, ha continuado avanzando, y los equipos de emergencia han estado en constante alerta desde las dos de la tarde. Se han registrado dos incendios activos, siendo uno de ellos particularmente peligroso por su cercanía a la comunidad. Sin embargo, la rápida intervención de los bomberos ha logrado prevenir una tragedia mayor, evitando que las llamas se acercaran a varias fincas.

El secretario también mencionó que, aunque algunos bomberos y voluntarios han sufrido golpes de calor, la situación se ha manejado con eficacia. "Algunas fincas tuvieron que ser evacuadas, pero gracias a la reacción oportuna, hemos podido salvaguardar vidas y propiedades", añadió.

Perdomo concluyó destacando la necesidad de apoyo adicional y la colaboración con la Agencia de Riesgo, lamentando que no se hayan podido obtener recursos suficientes para enfrentar esta emergencia de manera más efectiva.