Gobernador encargado del Tolima denuncia el fenómeno del “sicariato moral” en los medios de comunicación anónimos
- por Ondas de Ibagué
Alexander Castro se refiere a la creciente violencia de los medios de comunicación apócrifos que atacan a funcionarios públicos sin identificación.
El gobernador encargado del Tolima, Alexander Castro, expresó su preocupación ante el auge de medios de comunicación anónimos que, a su juicio, han recurrido al denominado "sicariato moral" para atacar a figuras públicas del departamento. Durante una intervención en el Comité de Derechos Humanos, Castro subrayó que, a diferencia de las balas físicas, estas agresiones verbales y mediáticas no tienen rostro ni identidad, lo que dificulta la identificación de los responsables.
"Estamos pasando de las balas asesinas a las balas mediáticas. Lo peor es que no sabemos de dónde vienen, pues estos medios se esconden bajo seudónimos, redes sociales y páginas sin registro legal", dijo Castro. Añadió que muchos de estos medios carecen de la estructura que caracteriza a un medio de comunicación legítimo, como la existencia de una dirección física, números de contacto y una línea editorial clara.
El mandatario resaltó que este fenómeno ha afectado a varios funcionarios, incluyendo a secretarios y a la gobernadora del Tolima, quienes han sido objeto de ataques constantes en plataformas no verificadas. Además, relató una experiencia personal en la que su hija le mostró las reacciones a un ataque proveniente de uno de estos medios anónimos, lo que lo llevó a involucrar a la Fiscalía para investigar los responsables.
Castro hizo un llamado a los medios de comunicación legalmente constituidos, pidiendo su colaboración en la lucha contra este nuevo tipo de violencia que, según él, pone en peligro la libertad de expresión y el derecho a la información veraz. "Es necesario parar este tipo de agresiones y cuidar cómo se informa a la opinión pública", concluyó el gobernador encargado.
Este fenómeno del "sicariato moral" está generando un debate sobre los límites de la libertad de expresión en la era digital y la responsabilidad de los comunicadores sociales frente a la proliferación de información no verificada.