En cámara ardiente el país despedirá a Miguel Uribe Turbay
- por Yudy Vallejo
Estos son los detalles que se han revelado hasta el momento de cómo será velado el cuerpo del senador y del homenaje que se le rendirá en el Capitolio Nacional. El público en general tendrá la oportunidad de ingresar a rendir sus respetos.
El Congreso de la República rendirá honores póstumos al senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, fallecido este lunes 11 de agosto en la Fundación Santa Fe, tras permanecer más de dos meses en estado crítico a causa del atentado que sufrió.
El cuerpo del legislador será trasladado sobre las 3:00 p. m. de este lunes al Salón Elíptico del Capitolio Nacional, donde permanecerá en cámara ardiente hasta el miércoles 13 de agosto a las 10:00 a. m. El primer día, el ingreso será exclusivo para familiares y amigos; el martes 12, las puertas estarán abiertas al público en general, de 8:00 a. m. a 6:00 p. m., con acceso por la Plaza de Bolívar. Finalmente, el miércoles se realizará un homenaje en el Congreso a las 9:00 a. m., reservado a familiares, antes de su traslado a la Catedral Primada de Colombia.
Durante su permanencia en el Capitolio, el Senado informó que la curul de Uribe Turbay quedará intacta, tal como lo estuvo durante los dos meses que estuvo hospitalizado. “Hoy queda como símbolo de su compromiso y servicio al país. Su labor y entrega quedarán siempre en nuestra memoria. Paz en su tumba”, expresó la corporación. En su escaño se mantiene una bandera de Colombia y fotografías con mensajes de aliento como “Fuerza Miguel” y “Te estamos esperando”.
En varias ciudades del país, autoridades locales decretaron días de duelo por el magnicidio. En Bogotá, el alcalde Carlos Fernando Galán declaró tres días de luto y destacó que “como ciudadano, concejal y secretario de Gobierno, Miguel le sirvió a la ciudad y trabajó por una Bogotá mejor”, exhortando a que estos días sean “de reflexión y unidad”.
Galán lo recordó como “un gran ser humano, un líder honesto y valiente, un político con verdadera vocación de servicio”, y lamentó profundamente su muerte: “A pesar de su propia tragedia, Miguel dedicó su vida a luchar por un país en paz y así será recordado”.