La inteligencia artificial se perfila como un motor clave para el desarrollo en el Tolima, pero no todos comparten el mismo entusiasmo. Mientras algunos ven en ella una oportunidad para la innovación y la modernización económica, otros temen que pueda desencadenar una crisis laboral.

En el marco de la Cumbre Ministerial Latinoamericana y del Caribe por la Inteligencia Artificial: Un Imperativo para la Educación, el Desarrollo Regional, la Equidad y la Democracia, celebrado en Cartagena, un tolimense hace la diferencia durante su participación en la discusión de la aplicación de la inteligencia artificial (IA) para potenciar las regiones y la educación en Colombia.

Se trata de Jonh Jairo Méndez Arteaga, actual vicerrector de Investigación-creación, innovación, extensión y proyección social de la Universidad del Tolima, quién explicó como la academia debe estar ligada con sus comunidades para actuar como catalizadoras del desarrollo regional, mediante la investigación aplicada y la innovación tecnológica.

“Las instituciones de educación superior pueden ayudar a las regiones a modernizar sus economías, creando empleos de mayor valor agregado y disminuyendo las brechas tecnológicas que actualmente existen entre las zonas urbanas y rurales” señaló Méndez.

Sin embargo, también fue enfático en señalar que uno de los temores más extendidos respecto a la inteligencia artificial es la creencia de que esta tecnología desplazará a los trabajadores, provocando una pérdida masiva de empleos. “La realidad es que la inteligencia artificial tiene el potencial de transformar el mercado laboral, creando nuevas oportunidades y modernizando los empleos existentes”, concluyó el alto funcionario.

Finalmente, el investigador recalcó que las universidades tienen un papel crucial en este proceso, liderando la investigación sobre los impactos de la IA en el trabajo y formando a las nuevas generaciones en las competencias necesarias para desempeñarse en un entorno laboral cada vez más digitalizado.