El secretario de Desarrollo Social señaló que estas personas “tienen la limosna de negocio”, lo cual genera diferentes problemáticas en la ciudad con la proliferación de esta población.

 

Uno de los mayores problemas que aqueja a la ciudad de Ibagué, tiene que ver con el aumento de los habitantes de calle, situación que desencadena percepción de inseguridad y salubridad, por lo que urge tomar acciones para combatir este flagelo.

Iván Quesada, secretario de Desarrollo Social y Comunitario de Ibagué, indicó que se están buscando apoyos para poder enfrentar el creciente número de ciudadanos en estas condiciones.

“Tenemos una preocupación enorme con el tema del habitante de calle, nos ha dado una recomendación especial de revisar qué podemos hacer, intentando buscar recursos del orden nacional e internacional, pero es una población que es muy compleja, porque genera un problema de salud pública”.

Sin embargo, el funcionario solicitó a los ciudadanos evitar darles recursos, ya que eso agudiza más la situación, por lo que se busca adoptar estrategias para regresar a las personas que no son de aquí a su lugar de origen.

“Queremos hacerle una invitación a la ciudadanía, por favor no le demos dinero, porque genera una problemática mayor, nosotros vamos a emplear unas estrategias para hacer una atención integral de estos habitantes y también tenemos el apoyo de una fundaciones”.

Finalmente, Quesada acotó que también esto es usado como un buen negocio económico, en el que los ciudadanos por pesar o temor, se ven obligados a darles dinero.

“No les demos limosna, las personas tienen muy buen corazón, somos personas generosas, pero hay que entender la problemática en la que están esas personas, porque muchas de ellos tienen eso de negocio en la ciudad y es victimizarse para recibir dinero y alimentos”.