Secuestro de un dragoneante del Inpec en el Valle del Cauca salpica a Ibagué
- por Edward Amaya M
Una carta salpicada con sangre, escrita a mano en una hoja de cuaderno cuadriculado y suscrita al parecer por una organización delictiva de Ibagué conocida como ‘Los Cebolleros’ generó alarma al interior del Inpec.
En la misiva que se hizo llegar al coronel Daniel Gutiérrez director de la institución, se le informa que esa organización tiene en su poder al dragoneante Sebastián Camilo Castañeda, quien labora en el municipio de Jamundí, Valle del Cauca y quien está desaparecido desde hace varios días.
En el ‘documento’ se exige el traslado de un recluso de la cárcel de Jamundí al Coiba de Picaleña en Ibagué. Sin embargo, no se especifica el nombre del detenido y en el mismo se indica que en una nueva comunicación se darán más detalles de la exigencia.
Las autoridades sin embargo tienen serias dudas de que la organización que allí se menciona tenga en su poder al servidor público y por el contrario creen que quieren aprovechar la desaparición del dragoneante. Incluso, uno de los sindicatos del Inpec aseguró que tienen indicios de que la desaparición de Castañeda estaría el Clan del Golfo.
Los sindicatos aprovecharon el hecho para denunciar que está siendo objeto de amenazas y pidieron una reunión con el ministro de Justicia e incluso con Gustavo Petro a quienes les exigen mayor compromiso con la seguridad de los miembros del Instituto Nacional Penitenciario.