La infraestructura educativa no se salvó tras la borrasca, la situación es tan crítica que hasta el tanque del agua salió volando, están sin luz e internet y se realizará alternancia por grupos para asistir a clases.

 

Siguen conociéndose las afectaciones tras el vendaval que se registró entre la tarde y noche de este lunes en Ibagué, en el que además de las ya conocidas más de 30 emergencias que atendieron organismos de socorro en diferentes puntos de la ciudad ni los colegios se salvaron.

Andrés Emilio Torres, rector de la Institución Educativa San Pedro Alejandrino, reveló que tras el fuerte aguacero se presentaron graves afectaciones en el colegio tales como, techo de los salones, cableado interno de energía, tejas afectadas y hasta un árbol sufrieron daños.

“Perdimos el techo de tres aulas de clase ubicadas en el segundo junto a la estructura que la soporta, perdimos cables de las redes internas de luz, reflectores, el tanque de agua salió volando, tejas desacomodadas, un árbol cayó sobre la misma institución y estamos sin luz e internet”.

A su vez, expresó que hoy solamente se logró trabajar con tres grupos de clase, debido a la situación compleja que quedó en la infraestructura luego de las fuertes lluvias y señaló que la sede Arado también sufrió daños.

“En la sede Arado el vendaval desacomodó varias tejas, produciendo que varios salones se inundarán, perdimos material didáctico de los docentes y nos encontramos tratando recuperar dos salones que están completamente inundados”.

Finalmente, señaló que la Secretaría de Educación ya tiene conocimiento del tema con el fin de poder realizar el consolidado y mirar el tema de las ayudas.

“Los daños pueden valer más de $15 millones y por el momento haremos una especie de pico y placa y citar algunos grados unos días y así alternar para que no sean los mismos los que pierdan clase, es la primera estrategia que vamos a implementar”.