El evento se llevaba a cabo en el sótano de un establecimiento comercial que fue sellado por el hecho.

La fiesta que había sido promocionada por redes sociales contó con participantes menores de edad de Ibagué y algunos de la capital del país.

Los adolescentes en su gran mayoría eran llevados hasta el lugar en buses.

En total se les impuso comparendo a 39 personas, por violación a las medidas sanitarias, de estos, 15 eran adolescentes, a quienes se les restablecieron los derechos y fueron entregados a sus padres.

Se realizó el cese temporal de actividad económica al establecimiento comercial. La intervención se realizó gracias a los cyber patrullajes y a información entregada por la comunidad.