Con sólo el control de aforos y el distanciamiento social continua en Ibagué la emergencia sanitaria
El alcalde Andrés Hurtado emitió un nuevo decreto en el que flexibilizó aún más las medidas restrictivas levantando el pico y cédula y la toma de temperatura.
Con la expedición del decreto 00072 del 1 de marzo, la Alcaldía de Ibagué flexibilizó redujo considerablemente las medidas restrictivas de control de la pandemia del COVID-19 en la ciudad.
A partir de ahora las únicas medidas que quedan vigentes en Ibagué son el uso obligatorio de tapabocas, el distanciamiento mínimo de dos metros con otras personas, el lavado frecuente de manos y el control de aforo en los establecimientos públicos y eventos en la ciudad.
Así se decidió por parte de la Administración Municipal, gracias a la reducción en los casos de contagios de Covid-19 y la disminución al 60 % de la ocupación de unidades de cuidados intensivos en Ibagué, lo que llevó a levantar la medida de ‘pico y cédula’ y de toma de temperatura.
“Tenemos un porcentaje de 97 % de casos recuperados en nuestra ciudad y un 3 % de casos activos que representan 466 personas que se encuentran con Covid-19 (…) tenemos una ocupación del 60 % de cuidados intensivos, lo que representa 121 camas disponibles”, señaló el alcalde Andrés Hurtado.
El Mandatario señaló que estas medidas van de la mano con el avance que se viene haciendo de la vacunación en la ciudad, donde ya hay más de 2.300 personas que iniciaron el proceso de inmunización que continuará esta semana con la llegada de otro lote de biológicos que seguirá siendo aplicado a todo el personal de la salud y los adultos mayores de los hogares geriátricos como lo ha previsto el Gobierno nacional.