Reclusos del Coiba de Picaleña llevan una semana sin agua, denuncian familiares de los afectados
- por Ondas de Ibagué

Tan solo dos semanas después de la visita del Ministro de Justicia Wilson Orejuela a la ciudad de Ibagué, en la que se comprometió con la problemática del agua en la cárcel de Picaleña, los reclusos de este centro denuncian que llevan una semana sin el preciado líquido.
“Nos enteramos que hubo un problema en la cárcel de Picaleña en el pabellón número 27, el cual se quedó sin agua razón por el cual se estaban perjudicando más de 200 internos; pero ya lo hemos solucionado a través del Uspec, quién ya tiene los recursos de 450 millones de pesos y el lunes traeremos las bombas para que empiecen a funcionar nuevamente”, aseguró el alto funcionario el pasado 20 de octubre.
Se esperaba que el lunes 25 de octubre llegaran las bombas prometidas, y el suministro empezara a fluir a los reclusos sin cortes ni demoras. No obstante, la señora Diana Marcela Escobar, esposa de uno de los internos, denunció a Ondas de Ibagué que su cónyuge y las decenas de compañeros que residen en el pabellón número cinco, llevan una semana sin recibir el suministro del agua.
“Hace cinco días no les llega el agua, solo les sale un chorro que no les sirve ni para bañarse, se está presentando en el bloque cinco en todos los patios que lo componen, la denuncia la hago pública en tanto el director Rubely Trujillo no hace absolutamente nada por los internos. Lo único que dice es que la motobomba se dañó y que tienen que aguantarse con ese chorrito de agua”, aseguró Diana Escobar.
Así mismo, añadió que son aproximadamente 250 personas, sin servicio de agua y en un clima caliente, algo que está afectando la salubridad del sitio. “El agua es un derecho fundamental, protegido por la constitución que no podemos vulnerar, pero el director de la cárcel lo está vulnerando (…) El director tiene la posibilidad de contratar o llamar a bomberos para que llenen un carrotanque y les suministren, pero no lo hace y lo digo con conocimiento de causa, pues yo estuve allí cuatro meses”, añadió.
Por lo pronto, el personal privado de la libertad continúa sorteando el día a día con el poco líquido en espera de que se cumplan las promesas del Ministro de Justicia y se les restablezca el servicio.