El gremio transportador de busetas en Ibagué confirmó que este fin de semana en que se aplicará el toque de queda permanente, no se prestará el servicio de transporte público colectivo en la ciudad y que desde el martes 4 de agosto se realizará un paro indefinido.

Los diferentes propietarios de busetas pudieron disculpas a los usuarios, pues la poca ayuda y disposición del Gobierno Municipal ha obligado al gremio a entrar en el cese de actividades.

"Queremos pedirle disculpas a nuestros usuarios de este medio de transporte, pero ya no aguantamos más, estamos trabajando a pérdidas y exponiendo a nuestros conductores al contagio del Coronavirus", manifestó Gefferson Cruz, propietario de buseta adscrito a la empresa Logalarza.

De igual forma, los propietarios de los vehículos que prestan este tipo de servicio, expresaron que no es válido cargar con toda la responsabilidad de este trabajo diario, dado que también requieren colaboración de la Administración municipal, lo que demuestra que no le importa este sector.

"Le hemos contribuido mucho al usuario y a la ciudadanía echándonos solos al hombro la prestación del servicio, mientras que el señor alcalde, definitivamente no está interesado en ayudarnos a las más de 700 familias propietarias de 978 busetas y a 1.200 conductores que somos los actores principales de esta actividad económica", resaltó.

El gremio manifestó además que, el alcalde no se ha podido comprometer con el gremio, teniendo la solución en sus manos.

Cabe resaltar que el paro indefinido que realizarán los propietarios de busetas en Ibagué el día martes 4 de agosto, iniciará con una movilización de todos los vehículos para luego iniciar con el cese de actividades.

 

¿Qué está pidiendo el gremio transportador de busetas?

De acuerdo con Gefferson Cruz, vocero y propietario de buseta, piden que la Administración municipal se comprometa con recursos y adopte todas las medidas necesarias para mitigar los efectos económicos causados por la pandemia.

Asimismo, piden un espacio en la agenda del alcalde de Ibagué, con el objetivo de llegar a un acuerdo y satisfacer las necesidades del municipio como los del gremio.

También, piden que se entienda la situación económica por la que muchos pasan ahora, teniendo en cuenta que trabajan a pérdidas y no pueden pagar lo necesario para adoptar los protocolos de bioseguridad ni pagar otros requisitos de las busetas.

Por: María Lucía Ortega, periodista local.