Para Juan Carlos Núñez, uno de los grandes retos que tiene la empresa ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado – Ibal, es prestar el servicio de suministro de agua potable de manera continua a los cerca de 150.000 usuarios con los que cuenta la entidad actualmente, a partir del buen manejo técnico en cada uno de los tanques de la ciudad.

Según Núñez, la capital del Tolima ha venido creciendo de una manera desordenada, donde las redes son ramificadas y sin circuitos. Lo anterior, hace que sectores de los diferentes distritos no cuenten con agua las 24 horas del día.

El gerente del Ibal asegura que, por más de 15 años, la empresa ha venido realizando regulaciones en horas de la noche, esto aumenta las quejas de la ciudadanía por la falta del servicio.

Con la nueva Administración, se implementarán las recomendaciones hechas por la empresa Contelac qué entregó el catastro de redes y los diseños de la sectorización hidráulica de la ciudad, por lo tanto se podrá realizar los circuitos y construir las estaciones que regulan la presión y el caudal.

Juan Carlos Núñez afirma que va a “adelgazar los gastos”, es decir, que de una u otra manera la empresa tendrá una política de austeridad.  Así mismo resalta que se cuenta con un presupuesto de $81.000 millones, de los cuales $70.000 millones son gastos de funcionamiento y que, desde el Ibal, se está revisando con toda la comisión de expertos para que integral y transparentemente se manejen estos recursos.

Por: Luz Nohelia Nieto, periodista local.