En el Concejo de Ibagué se llevó a cabo el debate de control político a la Secretaria de Cultura Cristina Prada, por el polémico contrato firmado con la empresaria Carolina Barrios para traer a Carlos Vives y Manuel Turizo a la ciudad, y el convenio suscrito con la Corporación Festival Folclórico para la logística de las festividades.

Los cabildantes criticaron la improvisación en la firma del contrato para traer a los artistas de talla internacional, debido a los graves errores que se cometieron y que hoy tienen a la funcionaria con varios procesos disciplinarios en curso.

Por ejemplo, el presidente de la corporación Juan Pablo Salazar dijo que Prada unificó en un solo objeto tres tipos de contrato, lo que es ilegal y acarrea sanciones por parte de los organismos de control.

Además, se advierte de sobrecostos en el contrato, por ejemplo, se pactó el pago de 81 millones de pesos por un camerino para los artistas, lo que haría sido antieconómico pues el municipio tenía como opción utilizar los recientemente remodelados camerinos del Estadio Manuel Murillo Toro.

Se criticó fuertemente a la directora de contratación del municipio pues cometió un error jurídico pues la forma de pago fue, según Salazar, un “copia y pegue” de un contrato de prestación de servicios, pues en un inicio se anuncia el pago fue de contado, y posteriormente quedó plasmado que la cancelación se hizo mediante mensualidades vencidas de 30 días.

Por su parte, Cristina Prada se defendió asegurando que “no es abogada” y por lo tanto desconocía los errores que se presentaron en el contrato firmado con la empresaria Carolina Barrios.

La funcionaria aseguró que dicho contrato pasó varios filtros antes de ser firmados, entre ellos, la revisión de la directora de contratación de la alcaldía quien nunca informó sobre las irregularidades que se han denunciado.

Los argumentos de Prada fueron calificados por los concejales de “pobres e insuficientes”, tanto así, que le desearon “la mejor de las suertes” al momento de enfrentar a los organismos de control pues por “errores más pequeños” funcionarios han sido fuertemente sancionados.

Por: Paola Rojas Gómez, periodista regional.